viernes, 30 de marzo de 2012

Paralelismos.

Hoy he mirado al cielo buscando respuestas
pero estaba demasiado celeste
vacío y primaveral.
Demasiado centrado en su inmensidad
para prestarme atención.
Estamos condenados a ser planos paralelos
convivimos sin tocarnos
él allá
el suelo y yo aquí.
Lo mismo que un Dios cualquiera
y todos los que le rezan
se buscan siempre, tenaces, devotos
sabiendo no hallarse.

He bajado la cabeza hasta el horizonte
donde, dicen, aquel cielo y mi vida
se tocan.
Rectas a la vista
entrecruzadas en el espacio
sin intersección posible.
Políticos, mendigos, empresarios, bebés
sindicatos, jubilados, estudiantes, muertos
inmigrantes, parados, enfermos, banqueros
coexistiendo sin entenderse
en una Torre de Babel en ruinas.

Pero a veces
sólo a veces
ni la coacción amiga de la hipocresía
ni la información amiga del interés
ni la violencia amiga del odio
ni la lógica amiga de las ideas
pueden sobreponerse a las personas
en plural
que son paralelas coincidentes.



En el tocadiscos:
Jorge Drexler  -  Milonga del Moro Judío

martes, 27 de marzo de 2012

Idas y vueltas (o decisiones).

Siempre fui reacio a tomar decisiones en días festivos. Más por mi fobia a decidir que por mi respeto hacia los días festivos. Pero dicen que con el tiempo uno se hace mayor y tiene que hacer cosas que no quiere, como meterse la camisa por dentro del pantalón, dejar de sonreír, fumar puros en bodas y leer en los periódicos la sección de economía. Sinceramente, me aterra pensar que esas cosas lleguen a ser parte de mí.

Cielo santo, ¿cómo voy a sucumbir yo a eso yo, que me rasco la entrepierna en público, que sigo pensando que Lucho es el que corta el bacalao en Luna Lunera, que no tengo zapatos y que todavía beso con miedo?

Pero ¡ay, amigos de veras! ¡ay, enemigos que vendréis! el camino se encarga de ser seguido. Mientras lo piso con la amabilidad de un caballo viejo, trato de pernoctar en estaciones de países lejanos, donde los viajeros cuentan las horas. Allí pienso, abrazado a mi abrigo verde de siempre. Miro mi calzado sucio y decido sin prisa, al tiempo que el ruido de un idioma desconocido me aleja de la realidad, de los agentes de seguridad con los brazos en jarra, de los enfermeros llevándose a un vagabundo inconsciente tras haber vaciado el mundo o una botella de vodka dentro de sí y de todo lo demás.

Luego subo a trenes que cercenan el amanecer inexorables, en busca de andenes abarrotados de almas de hielo que esquivan dudas con la vista fija en algún punto frente a sus frentes. Acepto el aire nuevo sobre mi piel y echo a andar, rápido, para que los alargados músculos tomen temperatura y para que mi mente vuelva, de alguna manera, a ser útil.

Al final sobrevienen los recuerdos, se apilan entre las cuatro esquinas de los ojos al ritmo de vasos chocando y pedaladas sin solución de continuidad. Los verbos que lo gobernaron todo vuelven a parecer adecuados, sea en forma de ilusión o de lo contrario. Y antes de poder darme cuenta, toca regresar.

Las cosas tienen que ser así, repentinas como los dedos de Cleveland Eaton destrozando el espacio entre dos fronteras. Absolutas como los ojos de Audrey Hepburn conteniendo todos los silencios. De otro modo, de un modo fácil, el vuelo de las mariposas sería brusco, los soles al rojo vivo no se entregarían cada tarde al mar y los dientes de una mujer mordiéndose los labios no causarían ninguna catástrofe.



En el tocadiscos:

viernes, 16 de marzo de 2012

Comunicación.

Hay tres ladridos cortando la noche.
Tres casi amigos diciéndose sí.
Tres ecuaciones buscando la incógnita,
de la que mañana me desprendí.

Tus mensajes en verso siempre me han resultado atroces. Amortajar la sonoridad que inventaste; encorsetarla entre anodinos espacios, saltos de línea y Times New Roman es peor que echarlos a la lumbre. No tengo el placer de conocer a los desarrolladores de Whatsapp, pero apostaría mi bulbo raquídeo a que mientras programaban no se imaginaban lo maravilloso que sería el sistema para el envío de poesía convencional. Apuesto a que veían más viable el uso de la herramienta como medio de comunicación entre enamorados, apropiado y optimizado para enviar "te cus" con ka y para quedar (también con ka). Ese otro tipo de poesía, en fin.

Y es que leer tus versos en la pantalla del teléfono es como mezclar la masturbación con el amor.



En el tocadiscos:
Azul y Negro  -  Technovision

jueves, 15 de marzo de 2012

Un postre.

Suceden días, igual que una madre
golpe a golpe espolvorea el azúcar
-blanco y dulce como arena de Luna-
tiñendo el pastel que nunca probaste.

Las certezas no son inexpugnables
los porqués nunca llegan a la altura
el deber no hará cenizas las dudas
que mastico siendo un hombre sin hambre.

¿Un hombre he dicho? Pobre iluso loco
no soy más que el tiempo que aún no está
el sabor de un postre que no conozco.

Viene, viene, viene y después se va
se aleja, como el licor del bizcocho
como tú de mí, sin mirar atrás.




En el tocadiscos:
Julia Fischer & Daniel Muller-Schott  -  Passacaglia (Händel/Halvorsen)

jueves, 8 de marzo de 2012

Respiraciones.

Una suave oscuridad
amortigua las corrientes
iniciáticas de un jueves
sin víscera ni moral.
Se oyen vidas respirar
ajenas a los tornados
soñando como alegato
en favor de las sonrisas
que contagiosas incitan
a enterrar el desencanto.




En el tocadiscos:
Maderita  -  Llegando hasta el Final
Llegando Hasta el Final by Maderita on Grooveshark

viernes, 2 de marzo de 2012

Seguidillas por Esteban.

Hoy vengo muy popular
y con la rima ligera
que traigo unas seguidillas
de la parroquia pepera.

El pobre González Pons
al que quiero como hermano
parece no tener sitio
en el equipo Mariano.
Se me ha quedado sin nada
por tener la lengua suelta
por defender a Garzón
y no ponerle de vuelta.

Rediós, Esteban del alma
con lo bien que te explicabas
hablando de los impuestos
y poniéndoles mil trabas
vienen ahora tus compis
el de la barba y Soraya
que gravamen a gravamen
han traspasado la raya.

Galán de camisa blanca
héroe de las señoras
dime qué es eso que tienes
que a todas las enamoras.

Amigo, te han traicionado
soterrando tu grandeza
y tu porte equiparable
tan solo al de la nobleza.
¿Qué decir? ¿Cómo explicar
el porqué de mi alabanza?
Pues porque estás a la altura
de Botella y Esperanza.

No puedo olvidar el día
que te entrevistó la Griso
cómo tiró alguna puya
y tú hiciste caso omiso.
Inquirió en la identidad
del PP como cristiano
describiste ese adjetivo
como un término mundano
como una tilde centrista
sin nada de tenebroso
sin nada que pueda daros
un sentido religioso.

En fin, genio incomprendido
voy terminando mi halago
espero que las gaviotas
te ayuden en el mal trago
y si no, no desesperes
sé que tienes buena escuela
y valdrás para el equipo
del Señor Rouco Varela.
Juntos lograréis poner
a esta España su cilicio
y evitar que se desmadre
entre sociatas y vicio.





En el tocadiscos:
Coro Madres PP Valencia - Somos Madres, mantenemos nuestra casa limpia y pura...